Ahora que ya aprendisteis a carvar sellos, ya estáis enganchados como yo y selláis hasta el papel higiénico, toca montarlos en una base. Pero una base chula, chula.

Sabéis que yo, cuando me obsesiono con algo me obsesiono bien. Bien de llegar al extremo de hacérmelo mirar. No os cuento nada que no os haya contado aquí.

Por aquí en Princessland parece que hemos llegado a un punto en el que nos salen los bebes de debajo de las piedras (no propios, no os flipéis...) y como no, siempre toca romperse la cabeza con el detalle que se le regala.

Previously on Little princess... CASO NAMBER FAIF: si eres una chica "aparentemente" mona que se peina y se maquilla y que se pone vestiditos y tacones, tienes que escuchar a Bisbal, Malú o Pablo Alborán.
Os pongo en situación: antro de muy mala muerte (esos siempre son los mejores) con suelo pegajoso y, gracias a la ley antitabaco, con ambiente lleno de efluvios alcohólicos y humanos. Oscuro, sin luces ni rayos láser ni bolas de discoteca. La barra llena de botellines de cerveza y alguna litrona de calimocho. Melenudos vestidos de negro, con barbas y tatuajes. Esos que no bailan, solo agitan la melena y le dan al pie.

Se abre la puerta y aparece little princess con su vestidito rosita y sus tacones. Pequeñita y delicada como una flor de cristal. Con las uñas pintadas de rosa pastel y su collarcito de perlas. De repente todos los ocupantes del local se giran hacia ella con cara de "esta niña se ha perdido". Se acerca a la barra toda tranqui y le dice al camarero: Little princess: "hola!!! Me pones una litrona de mocho, porfi?"
Camarero: "si claro... Tu sabes lo que es una litrona de mocho, verdad???"
Little princess: "jajajaja, hombre, a no ser que lo hayáis cambiado, una litrona de mocho sigue siendo un litro de vino con Coca-Cola!!! Jejejeje"
Camarero: "si... Ya... Es que... Perdona pero no tienes pinta de... Seguro que no te has confundido???"
Little princess: "hombre, hace mucho que no vengo pero, esto no es el antrodemalamuertedetodalavidadelacoru???"
Camarero: "ehhhh... Pues si..."
Little princess: "pues no te preocupes que no me he confundido. He quedado con unos colegas aquí. XDD". El camarero se da la vuelta, me prepara mi litrona de mocho y cuando me la va a cobrar aparecen por la puerta unos melenudos vestidos de negro...

Melenudo 1: "Little princess!!! Pitufa!!! Ya estas aquí!!! Ven aquí que te achuche enana!!!!"

Teníais que imaginaros la cara del camarero y la del resto del local!!! Y mas aun cuando empezó el concierto y ahí estaba yo en primera fila, dándolo todo procurando no perder ninguna perla con tanto meneo de melena y dejándome la voz para acabar convirtiéndome en Manolo al día siguiente.

Al final de la noche ya me había hecho colega del nuevo camarero y de algunos mas que andaban por ahí. Y allí estaba esta princesita de cristal en medio de todos esos melenudos, bebiendo calimocho y fumando un pitillo en la puerta.

Las apariencias engañan. Siempre. Para bien y para mal. Y desde aquí os digo que no hay heavy malo. Toda la gente que he conocido a lo largo de mi vida que estaba en ese mundo, han sido siempre personas súper agradables y muy buena gente (aunque siempre hay gilipollas en todos los sitios).

Como desde hace un tiempo vivo en modo señorita comiendo entre casa de abu y casa de supersuegri, pues ya casi me he olvidado de cocinar... Pero en vez en cuando se me da por hacer alguna cosita rica.